Aprovechando el puente del 6 de diciembre hicimos, por fin, una visita a Navalvillar de Pela (Badajoz). Nuestro objetivo no era otro que disfrutar de las grullas y de la naturaleza extremeña. Tuvimos éxitos en ambos.
Grullas vimos a miles y, aunque es cierto que no es que se dejan acercar mucho, a pesar de todo conseguimos observaciones y fotos interesantes.
No sólo las grullas son las especies a observar en estos arrozales, las avefrías también abundaban:
Durante horas recorrimos los caminos entre los arrozales hasta el atardecer.
Por la mañana visitamos la dehesa de Moheda Alta, donde está el centro de interpretación.
Desde allí pudimos acercarnos a los arrozales colindantes, donde un agricultor realizaba las tareas de "fangueado".
Una magnífica ocasión para que cientos de garcillas y gaviotas se dieran un festín, en el cual las pobres ranas nos tememos fueron el plato principal: